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Sara García es la primera mujer astronauta española, fue seleccionada en noviembre de 2022 por la Agencia Espacial Europea (ESA) como astronauta de reserva.
Por: eSTEAMadas
La primera astronauta española de la historia es bióloga molecular, en la actualidad lidera un proyecto para descubrir nuevos fármacos contra el cáncer de pulmón y de páncreas.
El azar (y el aviso de su tía, que vio la noticia en un periódico) la llevó a aplicar por un puesto para la Agencia Espacial Europea (ESA) y fue seleccionada de entre 23.000 personas como astronauta en reserva para la ESA, un proceso que duró 18 meses. “El titular decía: ‘La Agencia Espacial Europea busca mujeres para ir a Marte’. Me parecía ciencia ficción y no pensaba aplicar, pero al ver las características del puesto, decidí aplicar”. Su trabajo como investigadora oncológica “era un poco el trabajo de mis sueños, pensé que lo había encontrado. Y el de astronauta era como todo eso, pero llevado a un nivel superior, por eso lo intenté”.
Desde joven se sintió atraída por la educación en STEAM. “las matemáticas, la física, la química y especialmente la biología eran asignaturas que siempre me atrajeron”, recuerda Sara García, quien finalmente se decidió por el estudio de la biotecnología “porque de todas, la biología era la que la que más me atraía y ver la aplicación que tiene la biotecnología para mejorar la vida de la gente”.
García apunta que en la universidad no vio un especial desequilibrio entre hombres y mujeres, algo que sí ocurre a medida que va avanzando la carrera profesional: “El problema que suele ocurrir en ciencia y en estas disciplinas de investigación es el llamado efecto tijera a medida que vamos subiendo a puestos de responsabilidad a puestos tipo científico titular o líder de laboratorio, profesor titular, profesor de investigación, ahí el porcentaje se va desajustando en favor de los varones. Directores de centros de investigación o rectores de universidades ya es casi residual” la presencia de mujeres.
La astronauta considera que “por suerte, empieza a haber más referentes femeninos y más precedentes en todo este tipo de de profesiones de las que estamos hablando, pero no podemos pensar que por el hecho de ser mujer o que quizá lo vayamos a tener más difícil, ni siquiera nos permitamos intentarlo”.
Sara insta a chicos y chicas a perseguir sus sueños: “Les animo a perseguir aquello que les motive. No hay un único camino para conseguir un objetivo. Al final hay muchos caminos y te vas fijando en todas esas pequeñas cosas que te aportan los caminantes que te acompañan durante pequeños tramos. Nunca sabes dónde vas a acabar. Yo, todo lo que he hecho a lo largo de mi vida no lo hice para convertirme en astronauta, pero todos y cada uno de los pasos que he dado desde que era muy pequeña me han servido para esto”.